En Miami, segundo Masters Series de la temporada, donde Federer había ganado tanto en 2005 como en 2006, se sucedían partidos muy similares a los de Indian Wells. La historia se volvía a repetir y Willy Cañas eliminaba nuevamente al gran Federer en octavos de final (4ª ronda). Esta vez el partido fue una auténtica batalla y el argentino se lo llevó tras apuntarse dos tie-breaks (7-6, 2-6 y 7-6). Cañas demostraba así que era la nueva pesadilla de Federer. Dos torneos del suizo, dos veces que caía eliminado a las primeras de cambio de mano del argentino. Federer estaba de nuevo eliminado, y otra vez parecía el camino despejado para Rafa Nadal. Pero esta vez el mallorquín no pudo conquistar el título porque Novak Djokovic se tomó la revancha de Indian Wells eliminándole en cuartos de final con un excelente tenis (6-4 y 6-3). Así pues, los dos verdugos de los números 1 y 2 del ránking, llegaron a la final del domingo. El camino a la final para Willy Cañas tras derrotar a Federer fue un cruce con Tommy Robredo en cuartos (7-5 y 6-1) y con Ljubicic en semis (7-5 y 6-2), mientras que Djokovic repetía semifinal de Indian Wells vapuleando al escocés Murray (6-1 y 6-0).
Guillermo Cañas se estrenaba en una final de Masters Series mientras que Djokovic jugaba su segunda final consecutiva, y esta vez no la iba a dejar escapar. Novak tuvo controlado el partido en todo momento y se lo adjudicó en 3 sets (6-3, 6-2 y 6-4).
Primer Masters Series de su carrera para el serbio, que se metía con este título entre los 8 primeros del ránking y que a buen seguro estará entre los 8 elegidos de la Copa Masters de Shangai a final de año y que se presenta como un aspirante a pelear alguno de los tres Grand Slam que quedan, con permiso de Roger Federer y Rafael Nadal.
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